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Los medicamentos ototóxicos son aquellos que, entre sus efectos secundarios, pueden provocar hipoacusia y/o vértigo debido a las alteraciones a nivel del oído interno que pueden ocasionar. Es importante conocer estos fármacos ya que en algunos casos no se hace un buen uso. En el siguiente post te explicamos qué medicamentos son ototóxicos.
Par repasar la lista de los denominados fármacos ototóxicos vamos a referirnos a la lista elaborada por la Subcomisión del Uso Racional de los Medicamentos de la Sociedad Española Farmacéuticos Comunitarios y de Familia (SEFAC). Por un lado están los antibióticos ‘aminoglicósidos‘, que tienen ‘nombres raros’ como ‘Neomicina‘, ‘gentamicina’, ‘amikacina’, y que generalmente ningún médico de cabecera no los va a recetar ya que sólo se suelen dispensar en hospitales. ¿Para qué se suelen usar? Normalmente para tratar infecciones severas del abdomen y las vías urinarias, así como en casos de bacteriemia y endocarditis y sepsis de origen desconocido.
En segundo lugar, también se consideran medicamentos ototóxicos los diuréticos de asa, que se usan para el tratamiento de retenciones de líquido e insuficiencia cardíaca. En este caso, los más conocidos son la ‘furosemida’ (‘Seguril’) y la ‘Bumetanida’, aunque este último se usa mucho menos.
Cáncer y fármacos ototóxicos
La tercera categoría de medicamentos ototóxicos son los que se utilizan para tratar el cáncer, los llamados antineoplásicos. En este sentido, la quimioterapia, uno de los tratamientos principales contra el cáncer, puede ser agresiva para la audición debido al efecto del cisplatino.
Y una posible cuarta categoría serían los beta bloqueantes, que aunque no tan comunes a la hora de causar problemas auditivos tienen en nómina el ‘propanolol’, que se puede usar para controlar el ritmo del corazón y la tensión, e incluso para tratar la ansiedad.
