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La mayoría de nosotros convivimos con un exceso de ruido. El dato es ilustrativo: siete de cada diez personas se exponen a diario a valores que se consideran nocivos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los problemas empiezan cuando un hombre o mujer soporta más de 85 decibelios (dB) durante ocho horas o 100 dB durante 15 minutos. Disponer de una protección auditiva adecuada es clave. Hay diferentes modelos y tipos, dependiendo del ambiente y aficiones de cada persona.
La elección del tipo de protección auditiva está relacionada de forma directa con el contexto previsto de uso. En este sentido, el ruido en el trabajo es, sin duda, uno de los más destacados. De hecho, un estudio realizado en 2015 por Fremap en base a más de 800 mil reconocimientos médicos señala que la pérdida de audición o hipoacusia afecta en nuestro país al 32,5% de los empleados. Este chequeo a la salud general de los trabajadores en España sitúa la pérdida auditiva como el segundo problema más generalizado. El sobrepeso, que afecta al 54 por ciento de los empleados, ocupa el primer puesto, siendo el colesterol alto el que cierra este particular podio, con un 13,5%.
¿Qué tipos de protección auditiva hay?
La actual legislación laboral en España obliga a las empresas a dotar de protección acústica a sus empleados cuando el ambiente donde éstos operan registre un índice mayor de los citados 85 dB. En este sentido, un protector auditivo diseñado para el sector industrial proporciona una atenuación media de 30 dB de intensidad, siempre que se utilice de forma continuada al menos 8 horas al día de trabajo. La innovación tecnológica en estos sistemas de protección auditiva también ha sido de gran ayuda para reducir el índice de pérdida de audición en el trabajo. Desde los protectores con filtros acústicos a los que incorporan auriculares para facilitar la comunicación con otros compañeros, la nómina es extensa y variada.
Protección auditiva para dormir bien
El exceso de ruido en algunas ciudades también aconseja el uso de protección auditiva para garantizar poder dormir bien. En estos casos se recomiendan los denominados Moldes Descanso. Estos moldes están hechos de silicona extra blanda y son completamente huecos, por lo que son muy cómodos de llevar, incluso por la noche. Además no tienen filtros auditivos, por ello aíslan mejor frente a los ruidos externos.
Protección auditiva para músicos
Los músicos profesionales son, sin duda, un colectivo de riesgo en cuanto a posible pérdida de audición. De hecho, el Observatorio de Prevención Auditiva para los Músicos (OPAM), del que forma parte GAES, alerta de que los ensayos diarios y la exposición a sonidos de hasta 100 decibelios pueden causar trastornos auditivos a la mitad de los músicos. La mejor manera de amortiguar la sobreexposición a sonidos elevados es el uso de protectores auditivos especiales para músicos, que reducen entre 15 y 25 decibelios el impacto final.
Protección auditiva para deportistas y cazadores
También los cazadores están considerados como un colectivo de alto riesgo en lo que a la salud auditiva se refiere. Los datos ilustran esta calificación: la propia OMS señala que la actividad cinegética y los disparos que se generan pueden llegar a superar los 150 decibelios. El resultado es que según el estudio ‘La sordera del Cazador 2.0’, el 51% de los cazadores sufren ya problemas de audición irreversibles. Por este motivo, GAES cuenta con sistemas de protección auditiva especiales para la caza.
También aquellos que practican deportes de motor cuentan con diferentes modelos de protectores auditivos. En este caso, se tratan de modelos diseñados para que no molesten cuando se ha de llevar también el casco de protección.