Las recetas generales no funcionan, cada persona necesita una solución diferente para que la mejora de su calidad de vida se satisfactoria. Los factores que influyen en una perdida auditiva son diversos, desde las causas hasta el alcance, igual que los hábitos de vida son diferentes, por eso las soluciones necesitan ser personalizadas y adaptadas a las condiciones de cada persona. Los servicios de GAES velan por esa adaptación.
Las causas de la pérdida auditiva y su alcance son muy diversas, como también las características concretas de la afección de cada persona. La solución de una pérdida auditiva provocada por el envejecimiento natural no puede ser la misma que la ocasionada por un trauma sonoro o de una enfermedad degenerativa, igual que no se puede tratar de la misma manera una sordera profunda o una pérdida parcial, una afección unitaleral o una pérdida auditiva neurosensorial, unos tinnitus o una cofosis. Cada situación requiere una solución particular
Las diferentes manifestaciones de la hipoacusia neurosensorial tienen en común que la transmisión del sonido se hace de manera correcta por el oído externo y el medio, pero se interrumpe en el oído interno, tanto si la afección se encuentra en las células ciliadas como si está en el nervio auditivo. Por este motivo se ha llegado a la conclusión de que los audífonos digitales o implantes auditivos, como los cocleares, son las soluciones que ofrecen los mejores resultados. En el primer caso por el perfeccionamiento de la tecnología de ampliación del sonido y en el segundo por la alternativa a las vías de transmisión de ese mismo sonido.
En la pérdida auditiva unilateral uno de los oídos se ve aquejado por un nivel concreto de reducción de la audición, mientras que el otro mantiene toda su capacidad de percepción. Los tratamientos de estas situaciones son diversos, pero en algunos de los casos en los que la pérdida auditiva es especialmente profunda se recomienda el uso de audífonos CROS que utilizan una tecnología que permite transmitir la recepción del oído afectado por la pérdida al que escucha correctamente a través de sistemas diferentes incluidos los inalámbricos. En otras situaciones, la solución más recomendable es la de los implantes osteointegrados.
En los casos de la pérdida de audición conductiva, las dificultades de transmisión del sonido se producen en el oído externo o en el oído medio; el odio interno funciona correctamente, pero las vibraciones no llegan de la manera más adecuada de manera que se produce la sensación de no escuchar bien y una especie de efecto de resonancia. Debido a las condiciones de esta pérdida auditiva, las soluciones más eficientes, en función de las características concretas, son los audífonos convencionales o los implantes osteointegrados.
Una combinación de factores relacionados con la hipoacusia neurosensorial y la conductiva determina la que se considera hipoacusia mixta. Debido a esta complementariedad de causas, las deficiencias que provocan la pérdida auditiva se pueden encontrar en el oído interno, en el medio o en el externo. Siempre teniendo en cuenta que todas las circunstancias deben ser valoradas de manera personalizada, en los casos de hipoacusia mixta las respuestas más adecuadas acostumbran a ser los audífonos, sobre todo los audífonos retroauriculares, y diversos tipos de implantes, especialmente los osteointegrados.
Más información sobre la salud auditiva y las múltiples soluciones adecuadas para cada persona y su su oído.