La importancia de la higiene nasal.

Es muy frecuente que los niños pequeños tengan resfriados o catarros nasales, con moco nasal abundante, sobre todo cuando empiezan la guardería o el colegio.
Además, en muchos casos, el niño no sabe sonarse la nariz, con lo que la limpieza de sus fosas nasales es problemática.
Los lavados con suero fisiológico o preparados de agua marina son capaces de realizar una correcta limpieza de las fosas nasales, y es conveniente conseguir una nariz despejada para evitar la otitis que en muchas ocasiones acompaña al catarro nasal del niño.