Los acúfenos tras exposición al ruido.

Los acúfenos o tinnitus más frecuentes son los producidos por trauma acústico. Es decir, por exposición a ruidos fuertes.
Pero esto hay que matizarlo. Primero tenemos que conocer que no sólo el ruido es perjudicial. Cualquier sonido, aunque sea agradable, si tiene la suficiente intensidad, puede causar trauma acústico.
Por lo tanto, tenemos que distinguir:
  • Sonidos desagradables o ruido que, por su alta intensidad, pueden producir un daño agudo, es decir, un trauma acústico agudo o repentino. Una explosión, etc. que producen acúfenos temporales o permanentes, según la lesión producida en el oído interno.
  • Exposición al ruido de forma prolongada, crónica, como los trabajadores en empresas con nivel de ruido ambiente elevado, sin protección adecuada, que acaban teniendo hipoacusia y acúfenos por trauma acústico prolongado.
  • Los acúfenos que aparecen después de acudir a un concierto, una discoteca, o cualquier otro lugar con la música alta. Suelen ser bilaterales, temporales, desapareciendo paulatinamente en unas horas o días a lo sumo. Aunque no siempre es así. En ocasiones, si la exposición ha sido suficientemente importante, puede ocurrir que el acúfeno llegue a ser permanente.
Si tras un día de fiesta y música el ruido de sus oídos no cede o es más fuerte en uno de los oídos. es conveniente acudir al especialista para una valoración del oído y la audición.
  • Los acúfenos que pueden llegar a padecer, si no se protegen, profesionales de la música,  o de la hostelería, etc..., que permanecen durante horas, diariamente, en el ambiente con música a alta intensidad.