Picor de oídos y otitis de piscina.

La otitis externa, comunmente llamada otitis del nadador u otitis de piscina, es una infección del oído externo que produce inflamación muy dolorosa del conducto auditivo externo y que incluso, en ocasiones, afecta al pabellón auditivo.
Este tipo de otitis, muy común en época veraniega, por el uso intensivo de piscinas, playas, etc, es muy dolorosa y puede amargarte unas vacaciones.
Además del dolor, produce supuración, e incluso pérdida auditiva y acúfenos temporales.
Pero no todas las personas tienen la misma tendencia a padecer este tipo de otitis. Hay personas que no las padecen nunca, mientras que otras es habitual que las padezcan muchos veranos.
Una de las principales razones para que existan personas que padecen habitualmente este tipo de infección es la presencia de patologías o alteraciones del oído externo que las favorecen. Y entre estas, la más habitual es la descamación de la piel que se produce en las personas que padecen eccema de la piel del oído, con su síntoma típico de prurito o picor.
En estos pacientes la humedad que queda en el conducto auditivo después del baño, frecuentemente produce la infección de la piel eccematosa.
Por ello es muy importante que, si habitualmente tienes picor de oídos, tengas esto en cuenta, trates tu eccema, evites la entrada de agua en los oídos o, si ya ha entrado, procures secarlos totalmente.
Os dejo una imagen de un eccema de conducto típico.