Tapones de cera.

El acúmulo de cerumen, comúnmente llamado cera, en el oído, en concreto en el conducto auditivo externo, es algo muy frecuente y, habitualmente no produce ningún tipo de síntoma o molestia.

Pero cuando se forma un acúmulo suficiente para cerrar el conducto, el tapón de cerumen se convierte en sintomático. Produce molestias de diverso orden: sensación de taponamiento, hipoacusia, dolor, incluso mareo.

Existen diversos métodos instrumentales para extraer los tapones de cerumen. El más extendido de todos es el lavado con agua tibia mediante jeringa de presión.

Pero es necesario tener en cuenta que el lavado con agua está formalmente contraindicado cuando existe una perforación timpánica.

Si sabes o sospechas que tienes el tímpano perforado adviértelo y el médico utilizará algún otro método de extracción del cerumen.