Proteger los oídos en la piscina.

Las infecciones de oído producidas por la entrada de agua en los oídos no son raras.
La frecuencia aumenta cuando se trata del agua de piscinas o de la playa.
Se trata de la típica otitis del bañista u otitis del nadador.
Se trata de una otitis externa muy dolorosa y que precisa de una visita al médico y un tratamiento adecuado.
Habitualmente la causa radica en la entrada de agua en el oído que macera la piel del conducto auditivo y facilita la infección.
Mayor problema tienen los pacientes con una perforación del tímpano por una otitis media crónica.
En estos casos la entrada de agua a través de la perforación es causa habitual de una agudización de la otitis crónica, con supuración, etc.
Para evitar estos problemas podemos hacer uso de los tapones para baño, de los que hay muchos y distintos modelos, aunque los más efectivos son los realizados a medida para nuestros oídos.
Os dejo una imagen de tapones de baño a medida.