Los jóvenes y la pérdida auditiva.

Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, en en el mundo hay más de 40 millones de personas de entre 12 y 35 años que padecen pérdida de audición que les incapacita en mayor o menor grado.
Las causas son muy diversas, aunque hay una preocupación creciente en la OMS por el aumento de la exposición de los jóvenes a sonidos fuertes, y el grave riesgo de pérdida auditiva irreversible, y advirtiendo que son los jóvenes de entre 12 y 35 años de países con ingresos medianos y altos los que están expuestos a más riesgo.
Para minimizar este riesgo, la OMS recomienda seguir cinco consejos básicos de protección auditiva en el día a día:
  1. Mantener el volumen del sonido en niveles tolerables es esencial para evitar la pérdida de audición. Por ello, aconseja respetar los niveles seguros de exposición al ruido, utilizar tapones para los oídos y cascos o auriculares que se ajusten bien y que aíslen del ruido del entorno en los lugares ruidosos.
  2. Controlar que el tiempo de exposición a los ruidos debe ser limitado, ya que esa duración es uno de los principales factores que contribuyen a la pérdida de audición. Así, se recomienda hacer breves descansos auditivos; alejarse de los ruidos fuertes y limitar el tiempo diario de utilización de los aparatos de audio personales (mp3, etc).
  3. Vigilar los niveles seguros de exposición al ruido utilizando las nuevas tecnologías, como las Apps presentes en los teléfonos móviles, etc , que permiten medir el ruido y, conocer el riesgo de pérdida de audición.
  4. Por supuesto, acudir al especialista en caso de notar síntomas de estar perdiendo audición.
  5. Por último, es necesario hacer revisiones auditivas periódicas tanto en niños como mayores. Esto puede ayudar a detectar el inicio de la pérdida de la audición en su etapa inicial y poner medios para detener el deterioro de la audición.