No siempre es otitis.

Casi siempre las otitis, ya sean otitis externas u otitis medias agudas producen dolor de oído entre sus síntomas, quizás como síntoma principal.
Pero no siempre que duele el oído es por una otitis. En algunas ocasiones el dolor puede estar producido por un simple tapón de cera, sobre todo si está duro o en contacto con el tímpano. En otras ocasiones se trata de un cuerpo extraño introducido en el conducto auditivo, desde un insecto, una piedrecita, etc.
Otras veces se trata de un traumatismo. Ya sea un golpe directo, como un balonazo, o una bofetada, etc., sobre la oreja. O con un bastoncillo o algún otro instrumento introducido en el conducto auditivo. Pero también un traumatismo acústico, por un ruido muy fuerte, puede producir dolor. O un barotrauma, traumatismo por cambio de presión atmosférica, (por ejemplo en un viaje en avión).
Y no debemos olvidar que hasta la mitad de los dolores de oído son producidos por problemas ajenos al oído. Es lo que llamamos la otalgia refleja. Dolor de oído en los que la exploración del oído, la otoscopia es normal.
Las causas más frecuentes de la otalgia refleja son, entre otros, los problemas de la articulación temporomandibular (la ATM), alguna infección o similar de una pieza dentaria, sobre todo de las llamadas muelas del juicio. Las faringitis y amigdalitis, etc.., incluso en algunas ocasiones pueden ser indicio de otros problemas más importantes.
Por eso es importante, sobre todo si el dolor no cede pronto, acudir al especialista para valoración.