¿Y si no hacemos screening?

Leo la noticia que publicamos en el apartado de noticias de nuestra página. Se plantean los autores la conveniencia de seguir con los programas de cribado auditivo. No son los únicos. Desde hace unos pocos años se han publicado diversos estudios que ponen en duda la efectividad de unos programas de screening de la audición del recién nacido que, en ocasiones, dejan sin diagnosticar un porcentaje de niños y, además, provocan gastos sanitarios y molestias a los padres.

Y es verdad, los programas de screening no son perfectos, de hecho ni siquiera se hacen igual en todos los sitios, ni se utilizan las mismas pruebas auditivas.

Pero sin embargo, si algo está claro, es que antes de la adopción de los programas de cribado o screening, la media de edad de diagnóstico de hipoacusia profunda era de más de dos años. Demasiado tarde para iniciar el tratamiento con prótesis o implante coclear. Sin embargo con los programas de cribado, la media se sitúa entre los tres y seis meses, pudiendo comenzar la estimulación temprana y el tratamiento a tiempo de evitar secuelas permanentes.

Creo que el precio a pagar es pequeño, y que lo que necesitamos es mayor información y formación de los profesionales implicados. Y que estos se impliquen y proporcionen información clara y veraz a los padres, que seguro sabrán entender el proceso por el que hacemos pasar a su hijo.