Los audífonos son una ayuda auditiva que cambia la vida de sus usuarios. Además, suponen una importante inversión económica, por lo que es clave su mantenimiento. Saber cómo limpiar y cuidar tus audífonos implica alargar la vida de los mismos y conservar toda su efectividad y rendimiento. Estos consejos se recogen en la guía que GAES ofrece a todos sus clientes, y en la que se incluyen también pautas para la adaptación, coberturas de riesgo total o servicio de mantenimiento post garantía, entre otros servicios.
Con la adquisición de los audífonos se entrega siempre un kit de limpieza básico para realizar un mantenimiento diario de manera fácil y sencilla. El kit se compone de:
- Gamuza, que permite limpiar la superficie, el molde y la cápsula a medida o dome estándar de los audífonos, lo que permite eliminar los restos de humedad y suciedad que se acumulan a lo largo del día.
- Spray, ideal para limpiar con mayor eficacia la superficie de los audífonos, el molde
y la cápsula a medida o dome estándar. Se recomienda pulverizar el spray en una parte de la gamuza, limpiar el dispositivo y demás componentes y, tres minutos, después, secarlo con la parte seca de la gamuza. - Toallitas de limpieza, que se pueden utilizar como sustitutivo del spray, sobre todo para viajes.
- Alambre anticerumen, que evitar que una acumulación excesiva de cera
impida la salida correcta del sonido amplificado de los audífonos. Es importante utilizar este alambre con cuidado y sin presionar hacia dentro. - Herramienta limpieza venting, que permite, si se usa con frecuencia y según sea la segregación de cerumen del oído, mantener el orificio de ventilación del oído.
- Cepillo con imán para las baterías, que se puede utilizar para asegurar que no
queda ningún resto de suciedad o cerumen después de realizar las limpiezas con las
herramientas del kit. Al mismo tiempo, el cepillo incorpora en su base un imán que ayuda a extraer la pila de los audífonos cuando se tiene que cambiar.
Aparte del uso periódico de estos componentes de limpieza, hay una serie de consejos con los que conseguir el mejor mantenimiento de los audífonos:
- Nunca deje caer su ayuda auditiva sobre una superficie dura. Póngala sobre una mesa si debe cambiar la pila o limpiarla.
- Guarde su ayuda auditiva en un estuche mientras no la utilice.
- Si por cualquier motivo presenta un mal funcionamiento, no intente repararla por su cuenta. Diríjase a un audioprotesista de GAES, quien la revisará sin ningún compromiso.
- Nunca sumerja su ayuda auditiva en agua y evite que se moje. Acuérdese de quitársela cuando se duche, cuando se bañe y en la peluquería.
- Evite que su ayuda auditiva se exponga a un calor excesivo. Por ejemplo, bajo un secador de pelo o tras un cristal a la luz del sol.
- Quítese su ayuda auditiva al ponerse laca para el pelo, si debe realizar un examen médico radiológico y al pasar por arcos de seguridad de los aeropuertos o de otros organismos.