Los filtros son componentes del audífono que sirven para protegerlos de los agentes externos como la cera, la grasa de la piel, el polvo y la suciedad. Son especialmente importantes ya que evitan que los residuos atasquen el interior del aparato. A lo largo del tiempo, los filtros tienden a acumular restos que impiden el correcto funcionamiento del aparato. Cuando esto sucede, es necesario sustituirlos. Esto es todo lo que se debe saber sobre los filtros para audífonos.
Los filtros sirven para proteger todo lo que está dentro de los audífonos de los agentes externos. Este tipo de filtros está presente en todos los audífonos, sobre todo en los de gama alta, que tienen partes electrónicas en el interior del oído y que ,por tanto, que pueden verse afectadas, por ejemplo, por la cera presente en el conducto auditivo. Por lo tanto, podemos decir que la mayor parte de los audífonos presentes en el mercado dispone de estos componentes de protección.
Los filtros para audífonos son componentes fundamentales para protegerlos ante agentes externos. En especial, el filtro anticera protege el audífono de la cera presente en el interior del conducto, pero también de la grasa de la piel que está tanto dentro del conducto auditivo como detrás de la oreja, del polvo y de otros tipos de suciedad presentes en el ambiente. La presencia de estos filtros sirve para evitar que los restos atasquen, dañen todo el audífono e impidan el buen funcionamiento del dispositivo.
Como hemos visto antes, no todos los tipos de audífonos necesitan los mismos filtros. Cada dispositivo utiliza un filtro específico que tiene características muy precisas, tanto a nivel de dimensiones como de funciones. GAES, por ejemplo, comercializa audífonos retroauriculares BTE, audífonos RIC y audífonos endoauriculares ITE. El primer tipo utiliza filtros que protegen el micrófono ante los agentes externos, mientras que en los otros dos tipos se usan filtros anticera.
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