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El oído es el segundo sentido más valorado por los españoles. Sin embargo, la mayoría no actúa en consecuencia, pues sólo 1 de cada 10 revisa periódicamente su audición, según el I Estudio de hábitos de cuidado auditivo elaborado por GAES. Un dato preocupante y que justifica la necesidad de seguir concienciando a la población acerca de la salud auditiva. La celebración precisamente este sábado 3 de marzo del Día Internacional de la Audición es una buena ocasión para insistir al respecto.
Los datos del I Estudio de hábitos de cuidado auditivo, elaborado por GAES, son sin duda un estímulo para trabajar en favor de la sensibilización ciudadana sobre la salud auditiva. Y es que al dato de que sólo 1 de cada 10 españoles revisa periódicamente sus oídos hay que añadirle otro igual de preocupante: 2 de cada 10 afirman no haberse hecho nunca una revisión, proporción que sube a 3 de cada 10 en el caso de los jóvenes.
Es cierto que la hipoacusia es un trastorno natural asociado a la edad. De hecho, así lo consideran también el 70% de los españoles. Pero la tendencia actual, con prácticas inseguras de escucha -como usar dispositivos electrónicos y auriculares de forma reiterada y a un volumen mayor del recomendado-, está provocando que cada vez más jóvenes sufran pérdida de audición. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) le pone cifras al problema: cerca de 1.100 millones de personas entre 12 y 35 años están en riesgo de pérdida de audición.
El doctor en otorrinolaringología y especialista en la comunidad online Viviendo el Sonido, Juan Royo, reconoce este cambio de tendencia: “Cada vez vemos en las consultas más casos de pacientes, incluso jóvenes, expuestos a elevados niveles de ruido y cuya salud auditiva está empeorando”.
Problemas de autoestima derivados de no cuidar la salud auditiva
El estudio de hábitos de cuidado auditivo sí que confirma que los españoles son conscientes de los problemas derivados de la pérdida de audición: un 76% de los encuestados coinciden en que estos problemas provocan síntomas de depresión y afectan a la autoestima. De hecho, uno de los principales riesgos que conllevan los problemas de audición es que pueden acabar desembocando en una situación de aislamiento, ya que influyen en el día a día y en las actividades más cotidianas.
Cómo prevenir la hipoacusia o pérdida de audición
Según la OMS, cerca de 350 millones de personas tienen problemas auditivos, lo que representa un 5,3% de la población mundial. En España, el porcentaje es aún mayor, un 8%. Es más, según el estudio de GAES, 1 de cada 4 españoles reconoce que no oye bien, mientras que el 40% de la población mayor de 65 años sufre problemas de audición. Ante esta situación, la prevención se presenta como elemento clave para gozar de una buena salud auditiva. Seguir este decálogo de recomendaciones puede ser de gran ayuda en este sentido:
- Acudir a revisiones auditivas periódicamente, más aún si se presentan dificultades de escucha.
- Prestar especial atención a los niños que presenten problemas para comunicarse y que no suelan responder directamente a las preguntas.
- Tratar las infecciones de oído de manera precoz.
- No sobreexponerse a sonidos de gran intensidad de manera recurrente.
- Utilizar protección auditiva cuando se trabaje con equipos ruidosos
- Mantener un volumen moderado en los dispositivos de música y ser prudente con su uso.
- Evitar el consumo de medicamentos ototóxicos sin prescripción ni supervisión médica.
- Hábitos de vida saludables: llevar una dieta sana y equilibrada y huir del tabaco.
- En piscinas y playas, utilizar protectores adaptados para evitar que entre agua en los oídos.
- No introducir objetos en los oídos y, por tanto, evitar el uso de bastoncillos de algodón.
El uso de audífonos
Atendiendo a los problemas asociados a la pérdida auditiva, la buena noticia es que ésta puede tratarse de forma satisfactoria en la mayoría de los casos. Entre las soluciones más habituales se encuentran las adaptaciones audioprotésicas, es decir, los audífonos.
La gran evolución de la tecnología en los últimos años ha permitido que hoy en día estos dispositivos ofrezcan una mayor calidad de sonido y un mejor entendimiento de las palabras, además de tener un tamaño más reducido -hasta 3 centímetros o menos- y presentar un diseño más ergonómico y estético.
Aún así, España se sitúa a la cola de los países europeos en lo que a uso de audífonos se refiere, solo superado por Portugal, con un índice de penetración de un 8%. El ejemplo a seguir lo tenemos en Dinamarca, donde cerca del 45% de las personas con problemas auditivos utiliza audífono. “Estos datos nos demuestran que aún queda mucho camino por recorrer en materia de concienciación sobre salud auditiva”, reconoce el doctor Juan Royo.