Hoy martes 25 de febrero se celebra el Día Internacional del Implante Coclear. Una jornada que nos sirve para recordar uno de los grandes avances médicos del siglo pasado que ha cambiado la vida de miles de personas desde 1957. Este pequeño dispositivo electrónico ha puesto, solo en España, banda sonora a más de 15 mil personas, entre niños y adultos.
El Día Internacional del Implante Coclear sirve no solo para conmemorar la primera implantación de esta solución auditiva, sino que también, y sobre todo, supone una oportunidad para sensibilizar a la ciudadanía sobre las dificultades a las que deben hacer frente las personas con hipoacusia y la importancia que tienen para ellos y ellas este tipo de soluciones auditivas. Un buen ejemplo es el de José Luis, que reconoce haber experimentado un cambio “exponencial y milagroso” gracias al implante coclear.
También hoy es un buen día para recordar qué es y cómo funciona un implante coclear. Esta solución auditiva es un dispositivo médico electrónico que sustituye la función del oído interno dañado. Tiene dos partes: una externa llamada procesador de sonido, y una interna que se ubica en el oído interno mediante una intervención quirúrgica sencilla. El procesador recoge y transmite el sonido, codificado digitalmente, a la parte interna del sistema, que convierte estas señales en impulsos eléctricos y estimula así el nervio auditivo. Éste envía los impulsos al cerebro, donde se interpretan como sonido.
Después de la operación, la persona implantada debe asistir a sesiones de programación y ajuste del dispositivo, además de realizar una rehabilitación auditiva en un centro especializado con el apoyo y seguimiento de un profesional en audiología. Tras la intervención y el proceso de adaptación, los usuarios no sólo recuperan la capacidad auditiva, sino que también pueden hablar y comprender el lenguaje. Lo dicho: les cambia la vida.