El aparato vestibular es un complejo sensor del movimiento que informa al sistema nervioso central sobre nuestra postura corporal: recoge información sobre la posición y el movimiento de la cabeza y la integra centralmente con señales visuales y propioceptivas. Por eso el aparato vestibular también se conoce como el "órgano del equilibrio".
El equilibrio depende del sistema vestibular, situado en el oído interno, que transmite al cerebro información sobre la posición de la cabeza y el cuerpo. Es un sistema muy delicado, por lo que una ligera disfunción de uno de los órganos puede crear graves trastornos.
Una de las disfunciones más frecuentes del sistema vestibular es el vértigo o mareo, que se caracteriza por la sensación de que el entorno se mueve o gira. En caso de presentar estos síntomas, siempre se recomienda un examen de la función vestibular.
Las causas más frecuentes de vértigo casi siempre implican componentes del sistema vestibular periférico y se identifican en algunas de las enfermedades más comunes del oído interno: vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), enfermedad de Ménière, laberintitis, fístula perilinfática y neuritis vestibular.