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Pérdida auditiva y problemas cardiovasculares
Oído y corazón comparten vasos sanguíneos, conexión que explica que la pérdida de audición pueda ser síntoma o indicio de problemas cardiovasculares. Un reciente estudio realizado en China señala que a mayor grado de hipoacusia mayor riesgo de sufrir un ataque al corazón. El desorden emocional y psicológico que puede implicar la pérdida auditiva juega un papel clave en esta asociación.
El estrés y aislamiento social por pérdida auditiva el aumentan el riesgo de infarto
Los investigadores de la Southern Medical University, en Guangdong, remarcan la incidencia que tiene sobre el sistema cardivoascular la perdida de audición. La dificultad para seguir conversaciones y el posible aislamiento y menor participación en actividades sociales por este motivo suelen generar ansiedad y hasta depresión, situaciones de estrés que aumentan el riesgo de afecciones cardíacas. De hecho, este estudio, publicado en la revista ‘Heart’, ha puesto cifras a la influencia que este malestar emocional tiene en una posible insuficiencia cardíaca: el riesgo aumenta un 17%. Los propios investigadores explican que este malestar podría desencadenar respuestas hormonales de “lucha o huida” que aceleran el “endurecimiento de las arterias” y “sobrecargan el corazón”.
Mayor pérdida de audición, mayor riesgo de problemas cardiovasculares
Para este estudio, los investigadores analizaron los datos de más de 164.000 personas registradas en el Biobanco del Reino Unido, un proyecto de investigación sanitaria a largo plazo. Ninguno de estos participantes padecía insuficiencia cardíaca inicialmente, si bien cerca de 4.400 usaban audífonos. A todos ellos y ellas se les hizo un seguimiento durante 11 años. Los resultados obtenidos muestran que las personas con pérdida auditiva leve tenían un 15% más de riesgo de insuficiencia cardíaca, mientras que aquellas con pérdida auditiva más grave aumentaban las posibilidades hasta un 28%.
Problemas en la cóclea, posibles problemas en el corazón
Más allá de la influencia en nuestro corazón del malestar emocional que causa la pérdida auditiva, también hay un vínculo entre el sistema auditivo y el cardiovascular que explica que, si este segundo falla, el primero se resiente. Según los investigadores, “la rica distribución de capilares en la cóclea y la alta demanda metabólica del oído interno podrían hacer que estas regiones sean más sensibles a los trastornos vasculares sistémicos, en lugar de solo a los problemas circulatorios locales”. Ante esta conexión, la pérdida de audición puede ser un reflejo de la salud vascular de las personas y servir, por tanto, de un predictor temprano y sensible de enfermedades cardiovasculares.
La importancia de revisar la audición
Ante esta asociación directa entre pérdida de audición y mayor riesgo de problemas cardiovasculares cobra más importancia aún la necesidad de revisar de forma periódica nuestra audición. La detección temprana es clave para poder corregir una posible pérdida auditiva y todos aquellos problemas que pueda llevar asociados. Esta revisión es gratuita, rápida e indolora. Puedes reserva cita en tu centro más cercano.

